martes, 14 de octubre de 2014

TOCAR FONDO


Hay días que necesito caminar descalza por el filo del acantilado. Mirar hacia el infinito y que el vértigo se apodere de mis sentidos. Despeinarme. Sentir el viento helado refrescarme las ideas. Perderme en el horizonte.

Supongo que eres la única referencia que tengo a la que me puedo aferrar para resolver mis dudas. Mis huecos en blanco. Te has convertido en mi examen de verdadero o falso. Aprender o recaer. Una única opción de vivir aquello que hace tanto que deseo. Una única oportunidad que acaba de fraguar una brecha irreparable. Una fractura en la lista de deseo irreemplazable.


Cuando sientes que tocas fondo crees que es el final. Que después de ti ya no hay nada más. Pero en la vida cuando te hundes pasa como cuando te lanzas a la piscina. Al principio te angustias por no saber cómo volver a la superficie. Caes y caes. Te dejas llevar hasta que tocas fondo. Y cuando crees que no puedes más, que no habrá otro igual, en ese preciso instante te das cuenta que lo único posible a partir de ahora es propulsarnos hasta resurgir.

Lorena Burcat. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario